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Vitamina C Y Zinc

Vitamina C y Zinc: la pareja perfecta

Vitamina C y Zinc son la pareja perfecta para ayudarte a prevenir infecciones, cuidar tu salud y reforzar las defensas de tu organismo.

Por separado, la vitamina C y el zinc tienen propiedades beneficiosas que contribuyen a una mejora de un gran número de afecciones y para la prevención de enfermedades. Juntos, la sinergia que logran hace que su potencia como colaborador para el cuidado de la salud sea mayor.

Consumirlos a través de la alimentación es importante y aún más en invierno. Pero no siempre es suficiente, a menudo se precisa un aporte mayor del que se puede conseguir en una dieta saludable y equilibrada. Por ello puedes encontrar esta vitamina y este oligoelemento juntos en algunos complementos alimenticios en robis.es.

Vitamina C y Zinc: la pareja perfecta para la protección de la salud personal

¿Quieres conocer algunas de las formas en las que la pareja vitamina C y zinc te ayudan a proteger tu salud? Vamos a ver las más relevantes, de modo que conozcas mejor por qué ambas sustancias naturales son tan importantes para el organismo.

1 – Ayudan a mantener la salud bucodental

La vitamina C contribuye a unas encías y tejidos de la boca sanos, con menor riesgo de heridas, infecciones y úlceras. El zinc ayuda a reducir la placa contribuyendo así a sufrir menos problemas de caries y enfermedades periodontales como la gingivitis.

2 – Refuerzan las defensas del organismo

Actúan a distintos niveles sobre el sistema inmune para lograr reforzarlo y conseguir un organismo más sano. La vitamina C actúa en primer término para combatir a agentes externos que suponen una amenaza para la salud. El zinc actúa de forma más compleja ayudando a detectar amenazas específicas a nivel celular.

Su acción conjunta es muy poderosa para mantener al organismo más fuerte frente a resfriados y otras infecciones.

3 – Ayudan a cuidar tu belleza

Quizá suene frívolo ya que estamos hablando de salud. Pero lo cierto es que vitamina C y zinc también son grandes aliados de la belleza natural.

La reducción de la oxidación celular y su contribución al óptimo estado de la piel, cabello y uñas es muy relevante. Además favorecen la producción de colágeno y la barrera de protección dérmica. Y mantener su buen estado también favorece el mantenimiento de la salud, previniendo problemas como la sequedad de la piel que puede dar lugar a grietas e infecciones.

4 – Ayuda a prevenir el escorbuto

Aunque este problema se origina por un déficit de vitamina C, lo cierto es que la ausencia de otras vitaminas, minerales y oligoelementos lo agrava y el zinc es uno de los más importantes en esta cuestión.

5 – Protección celular

Es muy conocida la labor que la vitamina C ejerce en la prevención de la oxidación celular. Menos conocida pero no menos importante es la del zinc, uno de los antioxidantes más potentes. Juntos logran una poderosa acción frente al daño oxidativo en las células. Y eso se traduce en una mayor fortaleza del organismo así como al mantenimiento de la salud y el óptimo estado de los tejidos.

6 – Contribuye a un mayor bienestar en épocas difíciles

Pasar un resfriado, una enfermedad, un problema personal o una época en la que se requiere un alto rendimiento físico o intelectual deja agotado al organismo.

¿Y cómo evitar que se convierta en un episodio con agotamiento físico y además fatiga mental? La pareja vitamina C y zinc contribuyen a lograr un cuerpo y una mente más descansados, con mayor energía y vigor, menos vulnerable al cansancio. Eso se traduce en un organismo físico y una salud mental más fuertes.

Otros beneficios del zinc y la vitamina C para la salud y el bienestar

  • Colaboran en el mantenimiento de la salud ocular en aspectos como el óptimo estado de la retina y la síntesis del retinol. Esto ayuda, entre otras cuestiones, a prevenir problemas de cataratas.
  • Ayudan a un sistema endocrino sano y su óptimo funcionamiento, contribuyendo a prevenir desequilibrios y a favorecer la función de testículos y ovarios.
  • Forman parte de la síntesis del ARN y del ADN, esencial en el organismo y clave durante el embarazo.
  • Colaboran en la óptima cicatrización de heridas, acné, úlceras, quemaduras así como de cortes o incisiones de operaciones. Además, ayudan a prevenir infecciones en estos casos.

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