La edad, la genética, llevar una vida sedentaria o las situaciones que nos obliguen a estar inmovilizados durante muchas horas son algunas de las razones que pueden afectar negativamente a nuestra circulación sanguínea. Pero también existen ciertas afecciones que pueden dar lugar a la obstrucción de las arterias, haciendo que la sangre no fluya como debería. Es el caso, por ejemplo, de las personas que tienen altos niveles de colesterol.
Hay que tener en cuenta que el sistema circulatorio juega un papel clave en el buen funcionamiento de nuestro organismo, ya que se encarga de suministrar el oxígeno a todas las células del cuerpo, ayudar a sanar las heridas y lesiones, eliminar las toxinas y productos de desecho y regular la temperatura corporal.
Algunos de los síntomas que evidencias que detrás hay un grave problema circulatorio son las varices, la disfunción eréctil, las piernas cansadas o hinchadas, las ojeras oscuras, la pérdida de visión, los dolores de cabeza, la pérdida de memoria y los mareos.
Para ayudar a mejorar la circulación sanguínea, es importante llevar una dieta rica en ácidos grados Omega 3 que incluya mucha fruta, verdura, semillas y frutos secos, realizar baños de agua caliente y hacer ejercicio. Pero además, podemos suplementar nuestra dieta con complementos alimenticios para mejorar la circulación sanguínea. Por supuesto, siempre bajo supervisión médica.
Los complementos alimenticios para mejorar la circulación sanguínea de robis.es contienen extractos de plantas que favorecen el flujo sanguíneo, permitiendo que la cantidad de sangre que vuelva al corazón sea mayor y aliviando de esta forma los síntomas que se derivan de la insuficiencia venosa.
¿Cuáles son los mejores complementos alimenticios para mejorar la circulación sanguínea?
1. Vitamina A
La vitamina A posee propiedades antioxidantes que ayudan a prevenir la oxidación de las paredes de las arterias, lo que puede dar lugar a la aterosclerosis. Es recomendable consumir 800 microgramos de Vitamina A.
2. Vitamina B
En concreto la vitamina B3, conocida como niacina, sirve para fortalecer los vasos sanguíneas y aumentar el flujo de la sangre, de manera que llegue sin dificultad a los brazos y las piernas. Además favorece la producción de glóbulos rojos y ayuda a prevenir el endurecimiento de las arterias.
No obstante, también son fundamentales la vitamina B9 y la vitamina B12, ya que ayudan a neutralizar la homocisteína, que es uno de los mayores factores de riesgo de accidentes vasculares y uno de los mayores responsables del deterioro de la circulación.
3. Vitamina C
Aunque es una de las más conocidas, no todo el mundo sabe que, además de fortalecer nuestro sistema inmunológico, sirve para prevenir la formación de coágulos en la sangre y para fortalecer los capilares y arterias.
4. Vitamina E
Se trata de un antioxidante que mejora el flujo sanguíneo. Favorece la producción de glóbulos rojos y el transporte del oxígeno.
5. Calcio y magnesio
El calcio ayuda a prevenir la osteoporosis. Por su parte, el magnesio ayuda a asimilar el calcio y a prevenir la arritmia cardíaca. Se aconseja tomar alrededor de 800 mg diarios de calcio y unos 375 mg de magnesio. No obstante, si padeces problemas renales, es importante que lo consultes antes con tu médico.
6. Selenio
El selenio ayuda a proteger el corazón, reduciendo la hipertensión. Pero además, alivia los dolores de los ataques de angina de pecho. Lo más recomendable es tomar unos 55 microgramos de selenio al día.
Llevar una dieta sana y equilibrada, hacer ejercicios aeróbicos y complementar nuestras rutinas con suplementos nutricionales con principio vasoprotector pueden ayudarnos a mejorar mucho nuestro sistema circulatorio y, de esta forma, garantizar nuestro bienestar.