El ácido fólico en el embarazo es clave para el buen desarrollo del feto y para prevenir determinados problemas en el bebé. En esta etapa vital las necesidades de la mujer se incrementan y por eso es habitual que los médicos aconsejen ya desde que se busca el embarazo la toma de suplementos de folato, así como seguir una dieta rica en ácido fólico.
Qué es el ácido fólico
El ácido fólico es el nombre que recibe la vitamina B9. Cuando esta vitamina está presente en los alimentos se denomina ácido fólico y cuando se suministra en forma de complemento alimenticio o se añade a alimentos para enriquecerlos se conoce como folato, que no es otra cosa que una forma sintética de vitamina B9 idéntica a esta en su forma, función y beneficios.
Es un nutriente clave en la formación de glóbulos rojos y para la óptima función, estado y partición de las células.
Ácido fólico en el embarazo: ¿por qué es tan importante?
El ácido fólico es un nutriente cuya presencia es indispensable en el organismo, en especial para el buen estado y reproducción de las células. Durante la gestación es preciso generar nuevas células que formen los tejidos del feto.
Ácido fólico en el embarazo para prevenir deformaciones del cerebro, orofaciales y del tubo neural
Es el más conocido de los efectos del ácido fólico para el feto y permite prevenir problemas tan graves como la espina bífida. También ayuda a prevenir deformaciones en el cerebro del bebé, así como deformaciones orofaciales que pueden afectar al habla, la audición o su capacidad para alimentarse.
Prevención de defectos cardíacos congénitos
Otra de las razones de la importancia del ácido fólico en el embarazo es que ayuda a prevenir defectos en el corazón del feto, reduciendo en al menos un 6% la probabilidad de que el bebé sufra alguna cardiopatía congénita.
La toma de ácido fólico por la mujer embarazada contribuye al óptimo desarrollo del feto
El déficit de ácido fólico en el embarazo se relaciona con el bajo peso al nacer. Un bebé que nace con un peso bajo es más débil y presenta un mayor riesgo de supervivencia y mayores problemas para hacer frente a infecciones.
Ácido fólico para la mujer gestante para la prevención del parto prematuro
El riesgo de sufrir preeclampsia o aborto espontáneo es mayor en las mujeres con bajos niveles de ácido fólico. Por ello, desde hace años los médicos aconsejan a la mujer que busca quedarse embarazada comenzar a elevar su ingesta de ácido fólico y continuarla durante el embarazo.
Depresión postparto
El ácido fólico ayuda en el tratamiento de la depresión. La toma de ácido fólico en la cantidad adecuada durante el embarazo hasta su término contribuye a reducir el riesgo de que existan problemas graves de depresión postparto.
Cómo obtener el ácido fólico que necesita la mujer durante el embarazo
La cantidad diaria de ácido fólico que requiere una persona adulta es de 400 microgramos. En el caso de la mujer embarazada, esa necesidad se incrementa multiplicándose por 2,5 hasta llegar a los 1.000 microgramos diarios.
Lograr a través de la dieta el ácido fólico necesario durante la gestación es muy complicado, casi se podría decir que imposible dentro de una alimentación saludable y equilibrada. Por ello se recomienda la toma de complementos alimenticios con folato en el embarazo.
Además, algunas personas tienen dificultades para absorber el ácido fólico presente en los alimentos, como es el caso, entre otros, de las personas celíacas.
Dieta rica en ácido fólico en el embarazo
En la dieta puedes encontrar ácido fólico en alimentos como las lentejas, los cacahuetes, los garbanzos, el hígado de ternera, las verduras de hojas de color verde oscuro, así como las naranjas, los limones, los plátanos y las fresas, entre otros.
Tenlo en cuenta al decidir tus menús diarios.
Suplementación con folato durante la gestación
Consulta con tu matrona o el especialista médico que lleva tu embarazo si necesitas un aporte extra.
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